Claves en la instalación de cuadros eléctricos industriales

Elegir una correcta ubicación para la instalación de cuadros eléctricos es el primer paso para garantizar un buen resultado y minimizar futuros problemas. Para encontrar una buena ubicación hay que tener en cuenta dos aspectos principales, que sea fácilmente accesible para el personal de mantenimiento, y que por otro lado ofrezca protección contra posibles daños físicos y ambientales.

Para conseguir este segundo punto es esencial asegurarse de que la zona donde se instalará el cuadro esté limpia y libre de obstáculos que puedan poner en riesgo a la persona que vaya a manipular el cuadro. Es importante que la superficie sea plana y capaz de soportar el peso del panel.

Una vez se ha decidido el sitio en el que se fijará la instalación del cuadro eléctrico, hay que empezar con el montaje del mismo. Para montarlo es muy importante tener en cuenta las especificaciones del fabricante y seguirlas al pie de la letra. Es muy importante usar los soportes adecuados y fijar el cuadro correctamente para evitar una posterior vibración o un desplazamiento que pueda afectar a su funcionamiento.

Para conectar los cables se tienen que seguir los esquemas eléctricos suministrados y, sobre todo, utilizar el cableado correcto. La longitud del cable y su calibre son detalles muy importantes para evitar un futuro sobrecalentamiento y garantizar la correcta distribución de electricidad.

En Top Cable contamos con una amplia gama de cables para cuadros eléctricos para poder adaptarse de la mejor manera a las características de la instalación. Desde cable flexible para los trazados más complicados, hasta cables con la máxima regulación CPR para ofrecer la máxima seguridad en caso de incendio.

Antes de finalizar la instalación hay que cerciorarse de algunos aspectos que son de máxima importancia para garantizar el buen mantenimiento de la instalación. El primer paso, aunque puede parecer obvio, es asegurarse que la instalación funciona correctamente. Esta comprobación incluye pruebas de continuidad, pruebas de resistencia del aislamiento y comprobaciones del funcionamiento de los dispositivos de protección.

Es muy importante documentar todo el proceso de instalación, incluidos los esquemas eléctricos, los resultados de las pruebas y cualquier otra información relevante. Para facilitar la labor de futuros mantenimientos, cada componente de la instalación y cada cable tiene que dejarse bien etiquetados.

Con el objetivo de poder garantizar la máxima seguridad para el personal y los equipos que manipulen la instalación, ésta debe cumplir todas las normativas locales y nacionales de seguridad eléctrica. Sólo así cumplirán con la normativa legal.